Quise ser todo lo que buscabas y lo que no buscabas, lo justo e injusto, pero no te bastó.
Sentí con la yema de los dedos ese cielo azul y pintoresco, inalcanzable y alcanzable, pero caí.
Volé muy alto y me sentí como Ícaro, muy cerca del sol, pero mi alma estará en un lugar mejor.
Soñé con mi regreso con toca la vida de nuevo, pero en las tinieblas me quedé, para siempre.
Dicen que la vida y la muerte no pueden estar juntas, como la luna y el sol, aunque igual son amantes. Que lo prohibido es mirarte, pero si pudiera a tu lado estar se acabaría el amor, se avivaría la guerra y no tendríamos paz más que en el corazón.