lunes, 19 de diciembre de 2011

Rosa azul.

El ser filosofo no te hace más que nadie, sin embargo mi sonido oculto está entre calabozos...¿qué será de el?...pregunta al desconocido y escucha al tartamudo estremecerse sumergido en rotas promesas, cosas falsas y palpitaciones proseguidas por una oración sin un amén. 

Si, sonámbula pasó desapercibida, cenicienta de mis atardeceres, la bella de la historia sin rumbo codiciado..prosa sutil, coraje desarmado que es una piedra en el camino que desapareció para hallarse en la oscuridad de los laberintos ocultos; sabes que no dejo de pensar...¿cómo sucedió?¿por qué terminó? inalcanzables las respuestas que me finjo para no tirarme al piso al llorar por amor, sí, sombrío amor que me retumba en el oído, sonora historia, cosa del más allá. 

De la mano tomaba a su novia...y en lectura comprensiva callaba; solo pensaba, no sonreía susurrase al oído del amante lector que sin tiritar conocía y daba muestras de amor, beso a beso y canción por canción, rosa muerta, que ya no está en mi alrededor.

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